jueves, 17 de octubre de 2013

Ajedrez - Pablo del Corro






No es azar si te toca siempre el peón negro. Es una fatalidad, como el amor.
Por eso nunca moviste primero. Son las reglas de un juego que da ventajas
al más inteligente.
Cuando uno ataca, el otro se defiende. Cuando uno avanza, el otro, retrocede.
En cada descuido, una pérdida brutal.
La ingenuidad de tus Peones es lo que ha hecho que cayeran uno por uno.
Después los Alfiles. Y con ellos, tu confianza. La desesperación te lleva
a poner en juego los Caballos, sin medir las consecuencias. Es la vorágine
de la vida, en un campo de batalla. Se decide sobre la marcha.
Tu parte animal, diezmada. La integridad, en endechas. Has jurado defender
la Dama hasta las últimas consecuencias, jamás abandonarla. Antes, muerto.
Pero qué esperabas: tus filas abatidas; tu reino en llamas; la terquedad de
defender lo indefendible; el orgullo de elegir siempre morir de pie.
La decisión equivocada. Las sospechas. Ella se fue mucho antes de que
cedieran tus murallas. Huyó, como las ratas, entre las ratas de las cloacas
del palacio. Escapó a tiempo... Ahora estás cercado por los días. Un último
enroque te permitió sobrevivir protegido entre dos torres, en el único cubículo
posible. Una de ellas deja entrar el sol en las mañanas. Estás tramando algo
con lo poco que salvaste: papel y lápiz; y algunas palabras importantes.
Afuera, el enemigo ha montado una atalaya. En lo más alto, tu reloj.
Adentro, dos opciones: seguir escribiendo, y que revienten. O salirte del tablero.





5 comentarios:

  1. El ajedrez... la vida... una sola cosa. Hermoso texto Pablo. Mucho lo que dice y mucho también lo que no dice. Jorge L. Carranza

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  2. Qué bueno es haber conocido a Pablo, encontrar que las voces a veces encuentran el camino donde edificarse, no pierden la huella, encuentran su paraíso para vivir. La verdad que escuchar los textos de Pablo, es sencillamente un placer.

    Lily Chavez

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  3. Qué lindo Pablo, voy comprendiendo su comentario sobre el espacio y el compartir...;)

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  4. Este texto me gustó muchísimo. Así como en la vida todo es un tablero

    Andrea Casas

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  5. Inteligente, feroz, asi como la vida, (ya lo dijeron otros) como la vida. Felicitaciones.
    Marta Comelli.

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